martes, 14 de abril de 2009

COPAS DE ARBOLES


VOLCAN PACAYA

El Viento ya no es Borracho
Ya no se balancea de esquina a esquina besando los espacios diminutos, ya no hace circular los papeles legales para extinguirlos en el abismo, ya no silba su melodía en los atardeceres ilustrados silentes

El viento ya no es borracho.
Ya no tropieza con los cabellos de los rostros juveniles y los ocasos, yo no danza con el sauce a la orilla del río, ahora es feroz y terrible.

El viento ya no es borracho, ya no encontró copas en su camino…
Copas de arboles…

QUE


Que haga pausa el reproductor de tus encantos
Que tus sueños den acogida a mis quimeras
Que el poeta que admiras muera y te deje un enlace a mi blog
Que los fantasmas que te acosan me admitan en su club.
¿Que me pasa que te estoy recordando?

lunes, 6 de abril de 2009

HIJO NUESTRO


Hijo nuestro que estas en el vientre
Aunque no sabemos cual es tu nombre
Venga a nosotros tu sonrisa
No siempre se hara tu voluntad
Aquí en la tierra, ¡no sabemos en el cielo!
Te daremos el pan de cada día
Pero esperamos que no nos ofendas
Así cono nosotros no te ofenderemos
Esperamos que no caigas en tentación
Y que te libres de todo mal.

sábado, 4 de abril de 2009

ELLA NO DICE NADA


Ella no dice nada solo cocina
vaya a saber la causa
vaya a saber la causa
vaya a saber la causa de su alegría


Ella no dice nada solo sonríe
Cuando en lugar de sopa
sirve jazmines


Ella no dice nada lava y suspira
y a veces hasta vuela
de distraída

Ella no dice nada pero se entiende
Porque se pasa el día
teje que teje
(Facundo Cabral)

viernes, 3 de abril de 2009

Al Ocaso


Era un día tan feroz
Cuando renunciaba el sol
Y la tierra se llenó de soledad
Cuantas veces lo intentó
Cuantas eras rescató
Pero ahora ya era tiempo de volar

Y miró hacia el mar para extrañar su fulgor

Y en la tarde ser marchó
Y el ocaso preguntó
¿Dónde encontraré la luz para existir?

Era una día tan feroz
Cuando renunciaba el sol
Solo amor necesitó para existir

miércoles, 1 de abril de 2009

Extrañando















Aquí el sortilegio se contonea en los instantes de sosiego
Silabea palabras inquietantes, de ensueño, de albedrío.
Aquí la vida se torna delirante y apasionada
Pidiendo tregua a la leyenda que asecha por las esquinas
Pero aquí todo se extraña y hay sensación del retorno y de estadía
Y el canto del guardabarranco silba en la memoria
Después soñar con la selva que fue mi morada
Aquí los instantes bohemios saltan y salen al encuentro
Aquí tengo todo y al vez nada, solo la mirada al oriente
Al bosque, al río, al barrio, al pueblo, a lo que es mi todo.